Este concepto engloba la lucha contra microorganismos patógenos como son los virus, bacterias, hongos, etc.
Estos seres vivos pueden llegar a provocar graves enfermedades en las personas presentes en una instalación. La desinfección cada día se tiene más en cuenta debido a la toma de conciencia de la sociedad. Esto se debe a que los edificios donde trabajamos se constituyen en un hábitat ideal para el desarrollo de numerosos microorganismos, que han dado lugar a lo que conocemos como “Síndrome del Edificio Enfermo” que engloba toda una serie de patologías que pueden desarrollar las personas que viven o trabajan en una edificación.
El procedimiento más habitual en la desinfección ambiental de una instalación es la utilización de un producto desinfectante en base agua, mediante un equipo de nebulización el cual impulsa micro gotas. La sustancia activa entra en contacto con los microorganismos que están flotando en el aire al mismo tiempo que se posa en paredes, suelos y techos eliminando así estos.